REUNIÓN DE ENTRE SEMANA VIDA Y MINISTERIO CRISITIANO: 6 a 12 de Marzo de 2023
(LOS COMENTARIOS están tomadas directamente del libro ¡Disfrute
de la vida para siempre! Curso interactivo de la Biblia que estamos estudiando
en las reuniones de entre semana, deseamos que estas RESPUESTAS les sea de
mucha ayuda, pero los queremos animar a que se sigan preparando y así puedan
comentar usando sus propias palabras)
LECCIÓN 39
El punto de vista de Jehová sobre la sangre
La sangre es muy importante. Sin ella, nadie podría vivir. Como
Dios nos creó, él tiene el derecho de decirnos cómo debe usarse. ¿
1. ¿Cómo ve Jehová la sangre?
Para Jehová, la sangre representa la vida. Y, como la vida es un regalo
de Dios, la sangre también es sagrada.
2. ¿Prohíbe Dios algún uso de la sangre?
Jehová les ordenó a sus siervos que no comieran sangre y el cuerpo
gobernante dio esta instrucción a los cristianos: “Que se
abstengan [...] de sangre” (lea Hechos
15:28, 29).
¿Qué significa abstenerse de sangre? Implica no comer o beber
sangre ni comer carne que no haya sido desangrada. Tampoco debemos
consumir alimentos a los que se les ha añadido sangre.
¿Y qué hay del uso médico de la sangre? Algunos procedimientos o
tratamientos médicos violan claramente la ley de Dios, como por ejemplo las
transfusiones de sangre completa o de cualquiera de sus componentes principales.
Después de analizar las diferentes opciones, cada persona debe tomar su
decisión.
PROFUNDICEMOS EN EL TEMA
Veamos qué hay que tener en cuenta a la hora de elegir un tratamiento
médico.
3. Tome decisiones que complazcan a Jehová
¿Cómo puede usted tomar decisiones que estén de acuerdo con el punto de
vista de Dios sobre la sangre? Vean el VIDEO y luego hablen sobre la importancia de
seguir los pasos que vienen a continuación:
VIDEO: Cómo tomar buenas decisiones sobre el uso de la sangre (Transcripción)
Todo pasó tan rápido... Todos decían que necesitaba una transfusión
porque había perdido muchísima sangre y podía morirme. Los médicos me hablaban
de tratamientos que yo no conocía. Y mientras tanto yo pensaba: “¿Qué es esto? ¿Qué
me está diciendo?”. La doctora me explicó que sería una operación muy complicada
y que, si además no me ponía sangre, sería más difícil todavía. Los testigos de
Jehová amamos la vida y, ante un problema de salud, buscamos tratamientos que
nos salven la vida o nos curen. Pero, sobre todo, respetamos al Creador de la
vida y su ley sobre el uso de la sangre. Dios le dio esta ley por primera vez a
Noé y su familia. Después del Diluvio, les dijo que podían comer animales, pero
les mandó: La sangre representa la vida y no debe usarse mal. Dios le volvió a
dar esta ley al antiguo Israel: Y a los primeros cristianos se les recordó lo mismo:
Los Testigos seguimos obedeciendo esta ley. Pero, con tantos tratamientos médicos
que hay disponibles, puede ser difícil saber cómo aplicar este mandato. La
sangre puede dividirse en cuatro componentes principales: Nos abstenemos de sangre
al no aceptar transfusiones de sangre completa ni de ninguno de sus cuatro componentes.
¿Qué le dio fuerzas a un hermano para no aceptar sangre cuando tuvo una
emergencia? Hay que entender bien cómo Jehová quiere que usemos la sangre. Así
que me preparé bien. Investigué y le oré a Jehová para que me ayudara a
comprender lo que él piensa sobre el asunto y a obedecerle. Luego puse por escrito
lo que había decidido. Nunca me imaginé que iba a tener un accidente así. Le
agradezco mucho a Jehová que me ayudara a entender bien este tema, porque gracias
a eso pude tomar una decisión que le gustara a él y, al mismo tiempo, tener el
valor de defender mi postura. Las fracciones sanguíneas son partes más pequeñas
que se extraen de cualquiera de los cuatro componentes principales de la
sangre. La Biblia no dice nada específico sobre estas fracciones. Así que aceptarlas
es una decisión personal. Algunos piensan que estas fracciones ya no son
sangre. Otros rechazan todo lo que venga de la sangre. ¿Por qué se informó bien
una hermana para saber si aceptaría medicamentos que contenían fracciones sanguíneas?
Para mí, el reto con las fracciones era saber lo que yo pensaba y decidir por
mí misma lo que iba a aceptar, lo que no y por qué. Lo que estaba en juego era
mi relación con Jehová y tener la conciencia tranquila. Por eso, era una decisión
que nadie podía tomar por mí. Le dejé claro a mi doctor que bajo ninguna circunstancia
iba a aceptar sangre o cualquiera de sus cuatro componentes principales.
También le expliqué qué medicamentos y otros tratamientos sí iba a aceptar.
¿Qué preguntas deberían hacerse los cristianos sobre los tratamientos médicos
en los que se usa su propia sangre? Veamos lo que hizo una hermana para asegurarse
de actuar con la conciencia tranquila. Mi doctora me habló de un procedimiento
alternativo muy bueno. Era algo que ya conocía, pero le pedí que me diera más
detalles para asegurarme de que ese procedimiento no iba en contra de mi
conciencia. Así que estudié mucho sobre este tema y también le pedí a alguien
maduro que me ayudara a analizar toda la información. Tomé una decisión que me
dejó con la conciencia tranquila y sé que hizo feliz a Jehová. ¿Cómo puede informarse
bien para tomar buenas decisiones sobre el uso de la sangre? Pídale a Dios
sabiduría y su espíritu santo. Medite en lo que dice la Biblia e investigue los
tratamientos médicos que podrían ofrecerle. Si quiere, pida ayuda para conocer bien
las opciones que tiene disponibles. Y, por último, ponga por escrito sus decisiones.
Jehová sabe qué es lo mejor para nosotros. Cuando se pone a prueba nuestra
obediencia, él no nos deja solos. Nos ayuda. Si aceptamos su ayuda y respetamos
la vida que él nos dio, viviremos en el Paraíso y tendremos salud perfecta y
vida eterna.
- Ore pidiendo
sabiduría (Santiago
1:5).
- Busque
principios bíblicos relacionados y vea cómo aplicarlos (Proverbios
13:16).
- Infórmese de
las opciones que hay disponibles donde usted vive.
- Identifique
qué opciones no aceptaría de ninguna manera.
- Asegúrese de
que su decisión le deje con la conciencia tranquila (Hechos 24:16).b
- Tenga en
cuenta que nadie —ni siquiera su esposo, su esposa, un anciano o su
maestro de la Biblia— debería decirle qué decisión tendría que tomar en
asuntos de conciencia (Romanos 14:12).
- Deje por
escrito lo que haya decidido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario