Busquemos perlas escondidas (8 mins.)
- Mr 7:5-8. ¿Por qué los fariseos daban tanta importancia a lavarse las manos? (w16.08 pág. 30 párrs. 1-4).
Esta era una
de las muchas cuestiones por las que los enemigos de Jesús los criticaban a él
y a sus discípulos. La Ley mosaica contenía normas sobre la pureza ceremonial. Los
rabinos o maestros judíos daban muchas explicaciones sobre cada uno de los
detalles de estas leyes ya que eran motivo de una investigación acerca de las
circunstancias en las que puede ser contraída la impureza en cuestión, cómo y
en qué medida puede ser transmitida a otros, los utensilios y objetos
susceptibles de quedar impuros y, finalmente, los medios y ritos exigidos para
la purificación.
No es que les
preocupara la higiene. Los rabinos exigían que se derramara agua sobre las manos
antes de comer como parte de un rito. La obra antes citada dice: “Se discute
también qué recipientes han de usarse para derramar el agua, qué clase de agua
es la adecuada, quién ha de derramarla y qué proporción de las manos ha de
quedar cubierta por el agua”. La reacción de Jesús en los versículos 6 al 8
ante estas normas humanas fue sencilla.
- Mr 7:32-35. ¿Cómo podemos imitar la manera como Jesús trató al hombre sordo? (w00 15/2 págs. 17, 18 párrs. 9-11).
Jesús fue muy
considerado con los demás. Era sensible a los sentimientos ajenos, lo cual lo
motivó a actuar de manera acorde con esos sentimientos. Como cristianos,
hacemos bien en cultivar y demostrar la mente de Cristo a este respecto. Esto
realmente requiere que hablemos y actuemos de tal modo que se tengan en cuenta
los sentimientos ajenos.
En la
congregación podemos demostrar consideración por los sentimientos de los demás
tratándolos con dignidad y como nos gustaría que se nos tratara a nosotros; en
la familia el esposo y la esposa que verdaderamente se aman son sensibles a los
sentimientos de su pareja, evitan las palabras duras, la crítica constante y el
sarcasmo mordaz, pues no es fácil curar sentimientos heridos. Los hijos también
tienen sentimientos, y los padres amorosos los tienen en cuenta. Cuando se
necesita corrección, tales padres la dan respetando la dignidad de sus hijos y
no haciéndoles pasar vergüenza innecesaria.
- ¿Qué le ha enseñado sobre Jehová la lectura bíblica de esta semana?
Mr 7:10-13. Jesús condenó este engaño sobre el corbán que era la dadiva dedicada a Dios, de la misma manera, Jehová condena el engaño
a las personas de buena y por eso se esfuerza de que su organización lleve a
todos las buenas nuevas del reino de Dios.
Mr 7:31-37. Estos versículos nos
enseñan de Jehová su compasión y consideración reflejada en Jesús. Cuando le
trajeron a un hombre sordo y mudo lo llevo aparte al ver lo nervioso q estaba
el individuo. Nos demuestra que Jesús tenía muy en cuenta los sentimientos de
ellos.
Mr 8:1-8. Nos enseña de Jehová la
compasión reflejada en Jesucristo. Por ejemplo en una ocasión dijo "Me
compadezco de la muchedumbre”, porque aquellas personas no habían comido por
algún tiempo; así que las alimentó milagrosamente. Que nos sirva de aliento que
tenemos a Jehová como gobernante.
Mr 8:22-25. Jesucristo utilizó el poder
que Jehová le había dado para hacer milagros como el de curar a este ciego, lo
que nos demuestra lo que harán Jehová con Jesús en el futuro con la humanidad
obediente.
- ¿Qué otras perlas espirituales ha encontrado en la lectura bíblica de esta semana?
Mr 7:11. Marcos habla de expresiones,
tal vez poco conocidos para los lectores que no fueran judíos. Por ejemplo en
este versículo aclara que corbán es “una dádiva dedicada a Dios”. Marcos nos
pone así un ejemplo. Debemos tomar en consideración los antecedentes de las
personas cuando estemos predicando o pronunciando discursos en las reuniones de
congregación.
Mr 7:20-23. Nos enseña que la obediencia
a los requisitos divinos es importante, pero también que el valor de tal
obediencia depende de lo que anide en el corazón de cada uno de nosotros.
Mr 8:31. En las Escrituras Griegas
Cristianas se usa la expresión “sacerdotes principales” para referirse a los hombres
principales del sacerdocio, entre los que podían estar anteriores sumos
sacerdotes ya depuestos y, posiblemente, también los cabezas de las 24
divisiones sacerdotales.
Mr 8:38. Los adoradores verdaderos se
alegran de que se les identifique y reconozca como los que le dan a Jehová toda
su adoración y obediencia, por eso nunca debemos avergonzarnos de Jehová ni de
Jesús.
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